Social media según el coach Enrique San Juan
Retomo el blog de Escritura Corporativa después de haber dicho que no tengo tiempo y me resonara a lugar común. Ya se sabe que no sobra, pero igual me lo voy a tomar. ¿De acuerdo, Sr. coach?
Quienes vivimos de (¿por?) la escritura caemos en algunas trampas mortales como suponer que a la hora de escribir el cliente está primero. Si, lo está, pero después de nosotros. ¿Después? Lo dudo, pero seguro que en nosotros tampoco.
Estas reflexiones surgieron de un excelente taller que hice con Enrique San Juan, una especie de coach de los contenidos social media. Como soy adicta a las frases espectaculares una me quedó resonando: Quienes trabajamos en contenidos debemos tener en cuenta un 50% al lector, y el otro 50% a Google. Significa, la interpretación es mía y sólo mía, advertir que estamos en otro formato y que el secretario de redacción no es ya un cuerpo, sino una corporeidad. Y para rizar más el rizo, una corporeidad tiránica. O alguien puede discutir que las normas de este leviatán no son más severas que aquellas poco sofisticadas del entonces, temible manual de estilo de nuestros amados diarios. Porque aquí no sólo hay que enamorar al lector desde el primer párrafo, ¡Sino a Google! Y quien no las respete se pierde el paraíso prometido, nuestro lector.
El medio es el mensaje, y yo que viví para oponerme. ¡Vaya sentencia!
Lo cierto que uno de los motivos por los cuales dejé transitoriamente mi silla bloguera, se debe a que cuanto más iba afinando la herramienta, como un aiskolari, más miedo me daba la batalla. Sabía que no lo hacía bien, pero ignoraba cómo hacerlo mejor. Pues, ahora si veis algún titular que suena medio raro, no debe importaros, es para Google. Luego haré uno para vosotros, o tal vez sea medio raro. Como las conductas de Arlequín, el personaje de Goldoni, que se enredaba en su afán de complacer a dos patrones. Cosas de los contenidos. Del amor al arte. Y a vosotros.